1
A. He aquí, os digo que tenéis que confiar en mi palabra.
B. Si lo hacéis, con pleno propósito de corazón, veréis las láminas, así como el pectoral, el Urim y el Tumim que se le dio en la montaña al hermano de Jared, cuando éste habló con el Señor cara a cara, la espada de Labán, y los directores milagrosos que Lehí recibió mientras estaba en el desierto a la ribera del Mar Rojo.
C. Es por vuestra fe que veréis estas cosas, aquella misma fe que tuvieron los profetas de la antigüedad.
2
A. Después que hayáis obtenido la fe, y hayáis visto estas cosas con vuestros ojos, testificaréis de ellas por el poder de Dios.
B. Haréis esto con el fin de que mi siervo de José Smith, hijo, no sea destruido, para que con esta obra yo lleve a cabo mis rectos propósitos para con los hijos de los hombres.
C. Vosotros testificaréis que habéis visto estas cosas, así como mi siervo José Smith, hijo, las ha visto, y es por mi poder que él las ha visto, y es porque ha tenido fe;
D. Y ha traducido aquella parte del libro que le mandé traducir; y tan verdadero es como que vive vuestro Señor y vuestro Dios.
3
A. Por consiguiente, habéis recibido el mismo poder, la misma fe y el mismo don que él;
B. Y si ejecutáis estos últimos mandamientos que os he dado, los poderes de Satanás no prevalecerán contra vosotros; porque mi gracia os basta; y seréis exaltados en el día final.
C. Yo, Jesucristo, vuestro Señor y vuestro Dios os lo he dicho, con el fin de llevar a cabo mis rectos propósitos para con los hijos de los hombres. Amén.