Sección 59

1

A. He aquí, dice el Señor, benditos son aquéllos que han subido a esta tierra con el solo propósito de glorificarme, de acuerdo con mis mandamientos; porque los que vivan, heredarán la tierra: y los que mueran, descansarán de todas sus labores, y sus obras les seguirán; y en las moradas de mi Padre recibirán una corona que yo he preparado para ellos.

B. Sí, benditos son aquéllos cuyos pies se hallan sobre la tierra de Sión, quienes han obedecido mi evangelio, porque recibirán como recompensa las cosas buenas de la tierra, la cual producirá con toda su fuerza.

C. Los que son fieles y diligentes ante mí, también serán coronados con bendiciones de lo alto; sí, y con no pocos mandamientos, y con revelaciones a su debido tiempo.

2

A. Por lo tanto, les doy un mandamiento que dice así: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu diligencia, entendimiento y fuerza; y en el nombre de Jesucristo le servirás.

B. Amarás a tu prójimo como a ti mismo.

C. No hurtarás; ni cometerás adulterio, ni matarás, ni harás ninguna cosa semejante.

D. Darás gracias al Señor tu Dios en todas las cosas.

E. Ofrecerás un sacrificio al Señor tu Dios en rectitud, o sea el de un corazón quebrantado y un espíritu contrito.

F. Para que te conserves más limpio de las manchas del mundo, irás a la casa de oración y ofrecerás tus sacramentos en mi día santo; porque, de cierto, éste es el día que se te ha señalado para que descanses de tus obras y ofrezcas tus devociones al Altísimo.

G. Sin embargo, tus promesas solemnes se ofrecerán en rectitud todos los días y en toda ocasión;

H. Pero recuerda que en éste, el día del Señor, presentarás tus ofrendas y tus sacramentos al Altísimo, confesando tus pecados a tus hermanos, y ante el Señor.

3

A. Y en este día no harás ninguna otra cosa, sino preparar tus alimentos con sinceridad de corazón, a fin de que tus ayunos sean perfectos; o, en otras palabras, para que tu gozo sea cumplido.

B. De cierto, esto es ayunar y orar; o, en otros términos, regocijo y oración.

4

A. Si hacéis estas cosas con acción de gracias, con corazones y semblantes alegres, no con mucha risa, porque esto es pecado, sino con corazones felices y semblantes alegres;

B. De cierto os digo, que si hacéis esto, la plenitud de la tierra será vuestra, las bestias del campo y las aves del aire, y lo que trepa a los árboles y anda sobre la tierra;

C. Sí, y la hierba, y las cosas buenas que produce la tierra, ya sea para alimentos o vestiduras, para casas o graneros, para huertos, jardines o viñas.

D. Sí, todas las cosas que de la tierra salen, en su sazón están hechas para el beneficio y el uso del hombre, tanto para agradar a la vista como para alegrar el corazón; sí, para ser alimento, o servir de vestido, para gustar y para oler, para fortalecer el cuerpo y vivificar el alma.

5

A. Le place a Dios el haber dado todas estas cosas al hombre; porque para este fin fueron hechas, para ser usadas con buen juicio, no con exceso, ni por extorsión.

B. En nada ofende el hombre a Dios, o contra ninguno está encendido Su ira, sino contra aquéllos que no confiesan Su mano en todas las cosas, y no obedecen Sus mandamientos.

C. He aquí, esto es conforme a la ley y los profetas: por lo tanto no me molestéis más en cuanto a este asunto, sabed, más bien que el que hiciere las obras de rectitud, recibirá su galardón, aun la paz en este mundo y la vida eterna en el mundo venidero.

D. Yo, el Señor, lo he dicho y el Espíritu Santo da testimonio. Amén